A veces se necesita reformar, modernizar o aprovechar espacios que no se usan mucho dentro de la casa. Los techos con estructuras de aluminio, las cortinas o cerramientos de cristal pueden hacer que una terraza o jardín sea aprovechable hasta en los días de invierno o cuando llueva.
En este sentido, la web https://cepi.es/ representa una empresa con más de 40 años de experiencia y especialización en este campo, experta en sistemas y soluciones únicas en la industria del aluminio y el vidrio, adaptadas a las necesidades actuales de construcción, diseño y cuidado del medio ambiente
Todos los productos utilizados en la fabricación de estos sistemas están sujetos a todos los controles de calidad, de acuerdo con la normativa aplicable en cada caso y lugar.
Las pérgolas bioclimáticas son estructuras de aluminio que proporcionan una protección solar inteligente, una regulación natural de la temperatura y una protección contra la lluvia, el viento y la nieve.
Una empresa pérgolas bioclimáticas elabora este tipo de techos. La palabra bioclimática proviene de las lamas que crean automáticamente sombras y corrientes de aire para aclimatar la zona interior.
Las lamas motorizadas se abren y cierran mediante un mando a distancia o un smartphone para controlar la admisión de luz, calor, lluvia y corrientes de aire, permitiendo la entrada de luz durante el invierno y protegiendo del sol durante el verano.
Otras incorporan características técnicas como sensores de lluvia, viento, nieve y movimiento, iluminación LED, calefacción o sistemas de audio, y control remoto mediante mando a distancia o smartphone para ofrecer una funcionalidad óptima.
Las cortinas de cristal son un sistema móvil de cristal vertical que se puede abrir y cerrar libremente según las necesidades, o incluso abrir unas hojas y mantener otras cerradas.
Para aprovechar el espacio abierto, los paneles de vidrio, que miden unos 60 cm, se deslizan entre sí y cuando llegan al final se apilan en forma de bisagra. La principal diferencia es el efecto visual, las persianas de cristal no están estructuradas por lo que son muy ligeras a la vista y permiten ver todo el panorama exterior.
No confunden la estética del edificio, lo único que queda a la vista son los paneles de vidrio. Las cubiertas de las persianas de vidrio están hechas de vidrio templado.
Dicho vidrio se somete a un tratamiento térmico. Este proceso le otorga una mayor resistencia estructural al vidrio aumentando su resistencia hasta tres veces. Otra ventaja es que, en caso de golpes o que el panel se rompa se astillará en muchos y diminutos pedazos, lo cual las hace muy seguras.
Este tipo de paneles se adapta fácilmente a cualquier forma de balcón, porche o jardín, pudiendo adecuarse también a zonas redondeadas.
Suelen instalarse en el balcón, la terraza o el jardín para que puedan aprovechar este espacio en invierno o en los días de lluvia. Igualmente, pueden usarse en espacios interiores, para separar los ambientes sin que la sensación de amplitud se vea interrumpida y se aproveche la iluminación.
Indudablemente sí, pues los cerramientos de cristal ofrecen muchos beneficios. La primera ventaja que trae la instalación de un dosel para el balcón es el factor de seguridad, pues evita la entrada de ladrones o intrusos.
Otro beneficio es que proporciona espacios con más intimidad. A muchas personas les encanta la idea de vivir en un jardín, pero por lo general no les gusta mucho estar expuestos al exterior. La utilización de cerramientos de cristal como recurso decorativo permite, además, una mayor privacidad.
Por otro lado, las terrazas y balcones se pueden aprovechar en los meses de invierno o los días de lluvia. Es más, crean hasta un ambiente romántico con un libro y un chocolate caliente a la mano.
Una gran ventaja de utilizar un cerramiento de cristal para la terraza o balcón es el aislamiento acústico que ofrece. Esto último es demasiado importante en las grandes ciudades, donde el ruido del tráfico de los coches suele ser bastante molesto a toda hora.
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